🤎💛 "CANASTA DE CUENTOS MEXICANOS"💛🤎 creado por Lizeth Monroy

Creado y publicado por Lizeth Guadalupe Monroy Sanchez

¡ CANASTITAS EN SERIE !
🤎💛🤎 ¡ CANASTITAS EN SERIE ! 🤎💛🤎

Canastitas en serie es un relato de cuentos mexicanos el cual tiene como idea principal que es la de poder ofertar y vender sus canastitas de un pequeño indio.
Principalmente la lectura nos muestra a un viajero que llega a México y visita algunos estados de la república al llegar a Oaxaca se encuentro con un indito sentado afuera de su jacal, dicho indio hacia canastitas de paja y otras fibras que recogía de los campos tropicales estas canastitas eran muy exclusivas pues no había dos en el mismo lugar ya que los diseños que hacia el indito eran exclusivos pues les daba una pigmentación con algunos insectos y diversas plantas brindándole un toque único y exclusivo. 
Por lo tanto en el pueblito donde vivía dicho indio su esfuerzo y sacrificio no era valorado ya que las personas no pagaban el precio real de las canastitas y siempre querían regatear, pero al indito no le importaba él estaba orgulloso de su talento y prefería malbaratar sus obras de arte con tal de venderlas y sacar para sus gastos.

Cuando el viajero encontró al indito el vio lo brillante que eran sus canastitas pues tenían diversos diseños y creía que eran obras de arte abusando de su poco conocimiento del indito el viajero decidió comprarle unas cuantas pero también a un precio bajo para transportarlas a New York.

La idea intermedia del relato nos dice que el viajero fue a New York a ofertar estas canastitas que parecían una obra de arte la persona a las que se las vendió quería tener miles de estas canastitas para que sirvieran de envase para unos chocolates finos y por lo tanto requería de miles de canastitas.

El problema central del cuento nos dice que el viajero quería estafar al pobre indito explotándola para que realizara este trabajo arduo. El viajero va nuevamente al pueblo para hacer trato con el pequeño indio, el viajero estaba muy emocionado porque él pensaba que se aria millonario acosta del pobre indio ya que lo quería explotar laboralmente pues como un pequeño campesino aria doce mil canastitas en poco tiempo.

El viajero quería pactar el mismo precio con el indio y sutilmente abusar de él pero sorpresa el indito dijo que era una grande cantidad y pidió de favor que si lo dejaba pensar ya que estaban hablando de cantidades grandes que hasta el mismo desconocía hablaban de mucho dinero que el nunca había visto por lo tanto el viajero decidió darle su tiempo para pensar.

Como parte final del texto y lo más complejo y sorprendente de la lectura fue que a pesar de que el indito no sabía la gran cosa se tomó el tiempo para pensar cuánto se tardaría en hacer por lo menos tres docenas y todo lo que perdería por dedicarse a un solo trabajo el viajero no sabía todo el esfuerzo y sacrificio que hacía el campesino por hacer sus obras de arte,

solía tardar días e incluso semanas para poder realizar una canastita a la mañana siguiente que el viajero llegó el indito le dijo que estaría dispuesto a trabajar con él pero que el precio sería mayor y fijó un precio de 15 pesos por canastita y solo serian unas cuantos no habría miles porque eso tardaría miles de años incluso siglos para hacer lo que le pedía el viajero enojado le explicaba al indio que él se volvería millonario si aceptaba el trato pero el indio no lo veía así, el veía que solo se dedicaría a eso y perdería sus cosechas y no tendría para comer si solo se dedicara hacer canastitas.

El viajero muy enojado regresó a New York para deshacer el trato que lo iba a volver millonario, pues el desconocía la situación del indito y el esfuerzo que le conllevaba realizar una sola canastita.

Para finalizar esta lectura nos deja como enseñanza el valorar el tiempo y esfuerzo de cada persona por que cada uno conoce el sacrificio que cuesta conseguir algo valioso para nosotros.

Creado y publicado por Lizeth Guadalupe Monroy Sanchez

¡ AMISTAD !

💜🤍💜¡ AMISTAD !💜🤍💜

La historia de Monsieur René y un perrito callejero comienza en un restaurante en México.

Esta historia está llena de nostalgia pues los perritos solo esperan amor de los humanos como ya sabemos los animales son el mejor amigo del hombre.

Un día un perrito callejero caminaba por la calle Bolívar de la Ciudad de México  cuando de pronto se encontró frente a un restaurante que era de René un viejo con aspecto de vagabundo este probé animalito como era callejero obviamente era de esperarse que no había comido por lo tanto ese dia René pudo observar cómo este pequeño peludo lo miraba al primer instante los dos hicieron click pues el perrito negro estaba alegre ya que al mover su colita le expresaba sus emociones a René, ambos se sonreían y miraban fijamente.

Al pasar el tiempo René se compadeció del pobre animal y le ofreció unas pequeñas sobras que tenia por ahi, el peludo era muy educado ya que no se lanzaba como perro hambriento el era diferente pues tenía valores y prefería esperar mostrando su pequeña educacion que lo caracterizaba. René se sorprendió de su conducta muy correcta y estaba orgulloso de haberse encontrado a ese callejero luego de darle un poco de sobras el perrito cordialmente se despidió y huyó del lugar sin esperar más.

El perrito volvió al siguiente dia a la misma hora todos los días siempre fue agradecido con la persona que le daba de comer, pero un dia el perrito se decepciono de aquella persona que empezaba a considerar su amo, pues ese dia fue diferente ya que por problemas con el restaurante René se comportó de una manera distinta pues en esta ocasión lo único que le ofreció al pequeño perrito fue un cacho de pan duro lanzándolo sobre sus patas.

Rene recapacito lo mal que se había portado con el perrito y fue en busca de el con un enorme trozo de bistec pero eso solo seria en vano pues la actitud que mostró frente al perrito no había sido la correcta demasiado tarde se dio cuenta que había perdido un amigo sincero pues este pequeño perrito nunca volvió, aunque René aún tenía la esperanza de volverlo a encontrar.

La reflexión que nos deja este pequeño cuento es que aunque hayas tenido un mal dia nunca justificará una mala acción pues en ocasiones ser grosero y hacer cosas que no están bien pueden dañar los sentimientos de otros y núnca jamás volverán a ser los mismo.

Aritmética indígena nos relata un cuento en el cual un hombre tenía una perra terrier la cual dio vida a 5 cachorritos un señor llamado Crescencio quería una perrita pero no quería pagar el precio que costaba por lo tanto le daba muchas vueltas al asunto, Crescencio creía que eran unos hermosos y chulos perritos pero había uno en particular que le gustaba mucho decía que era muy lindo e iba a ser bravísimo cuando creciera, y sería un buen perseguidor de bandidos  raba ganados.

Creado y publicado por Lizeth Guadalupe Monroy Sanchez

¡ ARITMETICA INDIGENA !

💙🤍💙“ARITMÉTICA INDÍGENA”💙🤍💙

Crescencio se quería llevar al cachorrito sin pagar la plata argumentando que ni siquiera se quería llevar a ese perro por que salieron de una cruza horrible, a pesar de eso todavía fue al pueblo a rumorar sobre el vecino y eso ocasionó que la gente fuera a cobrar los favores que le habían hecho el vecino desde luego que se indignó y mencionó que no sabían el precio de sus cachorritos pues le costaron mucho alimento como leche, arroz y carne por lo tanto costarían un peso plata y quien estuviera dispuesto a pagarlo podrían llevarse a los cachorritos.

Crescencio de forma sutil pero cruel mencionaba que tenía una hija que sabía hacer muchas cosas como leer y escribir perfectamente su nombre pero sobre todo muy honesta, limpia y decente por lo cual no se bañaba en el río, para bañarse ocupaba un barril en la casa y lo hacía dos veces por semana.

Crescencio orgulloso de su hija decía  NO TIENE PIOJOS no señor uno o dos tal vez, PERO no muchos, argumentando que era una vergüenza vivir solo, no resultaba bien para ningún hombre por lo cual mientras le comprara un catre a Eulalia podía trabajar a cambio de un sueldo.

Eulalia  cobraría doce pesos al mes pero Crescencio tontamente disminuyó el sueldo y Eulalia trabajaría por siete cincuenta y estaría aprueba, y si acertaba permanecería por ocho meses.

Por lo cual Crescencio exigió un adelanto para comprarle cosas a su hija como un delantal y que si no le daba el famoso adelanto estaría rompiendo una costumbre sagrada obteniendo consigo un peso decidió irse pero a los pocos segundos regresó a comprar el pequeño cachorrito con el peso que el vecino le había dado, al obtener el perrito bonito y bravo debía cumplir con su palabra de mandar a trabajar a Eulalia ella también cumplió con la parte de su trato y así es como se maneja la aritmética indígena.  

Creado y publicado por Lizeth Guadalupe Monroy Sanchez

¡ EL SUPLICIO DE SAN ANTONIO !

💛🤎¡ EL SUPLICIO DE SAN ANTONIO !💛🤎

Cecilio mendez tenia la ilusion de comprarse un reloj y lo logró el reloj era muy fino hecho de níquel y se leía de veinticuatro horas lo que no representaba ninguna ventaja. Cecilio estaba muy orgulloso de haberse comprado ése reloj pues en la mina en la que trabajaba nadie llevaba un reloj de hecho se consideraba una persona muy importante pues podía decirle a la gente que hora era.

Un dia Cecilio se percató que había perdido su preciado reloj no sabia donde ni como ni en qué momento probablemente se le habría caído camino a la mina o en el trabajo no sabía en donde lo había perdido y justamente ese día nadie le preguntó la hora.

Cecilio preocupado pensó que nadie se atrevería a robarselo mucho menos a mostrarselo a alguien, a venderlo o empeñarlo pues el era un hombre inteligente y había pagado dos pesos para que le grabarán su nombre en la tapa del reloj y un tostón para que se lo bendijera el padre y así nadie pudiera borrarle el nombre pues estaba protegido por el señor de tal modo que nadie atrevería a robarselo.

Lo busco por un tiempo pero no tuvo éxito tuvo que esperarse hasta el domingo para que fuera a orar y así alguien lo encontrara y se lo devolviera.

Pasó una semana y durante esa semana el reloj no apareció Cecilio nuevamente fue a la iglesia pero ahora directamente hacia el nicho de San Antonio.

Se persino devotamente  y cuando no vio su reloj en el sitio en que esperaba encontrarlo esto es a los pues del santo buscando bajo el abito que este vestía y busco múltiples veces causando una falta de respeto  pues había sido una desilusión en su infantil creencia acerca de los poderes del santo y su deseo de ayudar a los humanos.

Cecilio suplico incansables veces a San Antonio que le devolviera su reloj si en realidad deseaba ayudar a la gente al no obtener lo que pidió prosiguió a realizar un castigo para los hombres perezosos el cual consistía en colgar de un pazo a un hombre atado de un saco de azúcar  pues no existía justificación alguna para no saber cual era el reloj de Cecilio.

Cecilio le dio una última oportunidad a San Antonio pero nunca encontró el reloj en los lugares que le decía al Santo.

Un sábado a mediodía se acercó a Cecilio uno de sus compañeros de trabajo diciéndole que cuanto le daría de albricias por regresarle su reloj qué encontró al limpiar los túneles, inmediatamente Cecilio ofreció un peso de albricas pero tenía que pagárselo ese mismo dia despues de la raya.

Al llegar la noche su amigo Leandro le devolvió su reloj en perfecto estado cobrando su respectivo peso pues según el lo había encontrado entre las piedras y al verlo se dio cuenta que era de su amigo.

Cecilio en ningún momento mencionó que había sido obra del santo pues solo estaba emocionado besando a su preciado reloj.

A la mañana siguiente Cecilio fue a liberar a su cautivo al llegar se percató que la rama donde estaba amarrado el santo se había roto y por lo tanto no le fue posible sacar al santo y se despidió diciendo "ADIÓS Y QUE EL SEÑOR TENGA PIEDAD DE TI"

Dos carboneros gritaban que había un ahogado en el peso, todo el pueblo se armó de cuerdas y lazos para rescatar al famoso ahogado al sacarlo se percataron que era San Antonio y había sido robado de la iglesia .

San antonio fue devuelto a la iglesia y este cuento nos deja como reflexión que siempre debemos cumplir con nuestra palabra pues es ella quien nos representa y caracteriza.

Creado y publicado por Lizeth Guadalupe Monroy Sanchez